En tu sencillez reside
la grandeza inmaculada .
Carente de tus galones
que te hacen enjoyada
el mundo comprueba que Tú
de por sí ya eres galana,
como novicia divina
y como la novia humana....
y mucho más Macarena,
y aun mucho más cercana,
tratándonos de tú a tú,
lo mismo de estar por casa,
con tus manos extendidas,
con tu carita lavada...
por instantes tu realeza
la dejaste aparcada
para hacer ver que las reinas
son también mujeres guapas
y que son aun más bellas
con solo mantilla y saya.
Y te muestras tal como eres,
al natural, sin más nada,
que estando esa cara bonita,
todo sobra y nada falta,
aun más hermosa si cabe,
más morena, más lozana.
Todo lo que diga es poco
para belleza tan alta
y me lo dicen tus ojos,
esos dos que reemplazan
el brillo de tu corona
que cual Reina te proclama...
y sin manto, sin corona,
y sin joyas, sin alhajas...
así me gusta, así quiero
ver el cenit de tu Gracia,
sencillamente grandiosa,
macarenamente guapa.
Unos ropajes sencillos,
humildemente ataviada...
¡Así me gusta verte!
Y solo con eso basta:
más macarena si cabe
y mucho más sevillana
pues tu joya y tu vestido
siempre serán la Esperanza...
la grandeza inmaculada .
Carente de tus galones
que te hacen enjoyada
el mundo comprueba que Tú
de por sí ya eres galana,
como novicia divina
y como la novia humana....
y mucho más Macarena,
y aun mucho más cercana,
tratándonos de tú a tú,
lo mismo de estar por casa,
con tus manos extendidas,
con tu carita lavada...
por instantes tu realeza
la dejaste aparcada
para hacer ver que las reinas
son también mujeres guapas
y que son aun más bellas
con solo mantilla y saya.
Y te muestras tal como eres,
al natural, sin más nada,
que estando esa cara bonita,
todo sobra y nada falta,
aun más hermosa si cabe,
más morena, más lozana.
Todo lo que diga es poco
para belleza tan alta
y me lo dicen tus ojos,
esos dos que reemplazan
el brillo de tu corona
que cual Reina te proclama...
y sin manto, sin corona,
y sin joyas, sin alhajas...
así me gusta, así quiero
ver el cenit de tu Gracia,
sencillamente grandiosa,
macarenamente guapa.
Unos ropajes sencillos,
humildemente ataviada...
¡Así me gusta verte!
Y solo con eso basta:
más macarena si cabe
y mucho más sevillana
pues tu joya y tu vestido
siempre serán la Esperanza...
1 comentario:
Enhorabuena, no he podido escribir antes pero me encantan todas todas.
Hermana, ya falta poquito.
Saludos sentenciosos desde Feria.
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