Amor que ver clavado tanto siento
en la Cruz -para alguno simple leña
que en su indiferencia olvida y desdeña-
es mi bálsamo de Fe y de sustento.
Mi Fe amparo contra marea y viento.
Y a cambio de este amor-su Santo y Seña-
aun muerto siempre ofrece y siempre enseña
que es posible el amor sin sufrimiento.
Y no pide a cambio lo inalcanzable
ni siquiera lo visible y lo palpable.
Solo pide el amor como el que ha dado.
Es por eso el Amor que tanto quiero.
Amor de amor prendido del madero
y mi amor que del suyo se ha prendado.
1 comentario:
Impresionantemente bello, enhorabuena poeta.
Besos.
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